Talleres Miravalles

En el presente archivo no se contempla únicamente la historia de esta compañía por su capacidad industrial en la construcción de material ferroviario y de Obras Publicas, tratando más concretamente el establecimiento de un  ferrocarril propio, para unir la factoría con la estación de Miravalles en la línea de Castejón a Bilbao.

Talleres de Miravalles, foto cedida por Iñaki García Uribe, archivo MVF

Resumiendo lo vertido  ( Olaizola Elordi, H del T.   ) manifestaremos el establecimiento en 1878 de una pequeña siderurgia  de hierro dulce, por la empresa Olaechea y Cía, una sociedad que no pudo afrontar la competencia de altos hornos de Bilbao y Vizcaya, cerrando en 1880, siendo adquirida por Antonio Ruiz de Velasco y  Leyva para establecer la fábrica de hierro de San Bartolomé.

De nuevo en 1892 la fábrica fue adquirida por Ramón de La Sota por  100.000 Pts y transferida a la Sociedad Anónima Vasco-Belga, una sociedad que contaba con un capital de 1.000.000 Pts. y como accionistas a : Víctor Chavarri, Augusto Lecoq, Juan Alonso Allende, Eduardo Aznar y Ramón de la Sota. Cuya actividad se destinaría a la construcción de puentes, calderas, y  material móvil ferroviario.

Suministraron gran parte de los cargaderos tipo ” cantaliver ” de carbón, entre ellos los  de Saltacaballo (Setares), Castro-Alen, Castro-Traslaviña, Dícido y Agua Amarga (Almería), y multitud de unidades para dotar de material ferroviario a las sociedades ferroviarias de la costa vasca .

Cargadero de Castro a Alen, Postal comercial , archivo Museo Vasco del Ferrocarril.

El abandono de Ramón de La Sota en 1995, fagocitó el  control de Víctor Chávarri. Pasando la sociedad a partir de 1912,  a la construcción de material ferroviario: vagones de vía ancha y estrecha, vagonetas para minas y ferrocarriles industriales y material para instalaciones fijas.  En 1917 emprendió la producción de ténderes, furgones y coches de viajeros.

Minas de Cala , vagón plataforma , construido por Talleres de Miravalles , fondo MVF

Volviendo a nuestro interés manifestado en la creación de este archivo, sobre el establecimiento de su línea propia entre a factoría y la estación de Miravalles, destacaremos que la Dirección General de Obras  Públicas señaló para el 13 de noviembre de 1916 el acto de adjudicación en pública subasta de un tranvía de sangre desde la estación de Miravalles, línea de Castejón a Bilbao , hasta la factoría de Talleres de Miravalles, solicitada por la sociedad “Chavarri, Petrement y Cia “, depositando proyecto y fianza de 227 Pts ( Gaceta de los Caminos de Hierro, 24.09.1916). Se le concedía a la sociedad solicitante el derecho de tanteo y se valoraba el proyecto en 1.065 Pts

En cuyo caso debería acogerse al pliego de condiciones particulares de la concesión, entre las que figuraban : que deberií ajustarse a los términos del proyecto presentado en la solicitud , aprobado por la R.O. 05.04.1915 ; depositar una fianza definitiva de 1.132 Pts y iniciar los trabajos de construcción a los tres meses de haberse publicado la R.O. de a concesión, concluyendo al año y medio. El representante legal de la empresa solicitante, aceptó estas condiciones particulares el 28.04.1916.

Benigno Chavarri y Salazar, Marqués de Chavarri

La concesión otorgada por la R.O. 27.12.1916, le llegó por falta de postores en el acto de la subasta, otorgada a Chavarri ,Petrement y Cía , de acuerdo con el pliego de condiciones particulares aprobado por la R.O. 28,03.1915 ( GCH, 24.12.2016).

Los Talleres de Miravalles se convirtieron en Sociedad Anónima, formando parte de su primer Consejo de Administración:

(GCH, 20.05.1920)

En 1925, se fusionaron con los  talleres de Palencia, y los de Ibaizabal, de Amorebieta (Bizkaia), pasando a denominarse Talleres de Miravalles, Palencia e Ibaizabal. ( GCH, 20.11.1925) . Los Talleres Miravalles constituidos en Bilbao como Sociedad anónima,  obedecían a la fusión de Talleres Miravalles, Talleres Palencia y Talleres Ibaizabal, también Sociedades anónimas, haciéndose cargo ]a nueva sociedad del activo y pasivo de las tres y de los contratos y obras pendientes.

El Consejo de Administración está formado por:

(GCH, 20.11.1925)

La  intervención en este tipo de actividades cayó en los años treinta arrastrando al cierre  de los talleres de Palencia y Amorebieta en tanto que la plantilla de la compañía pasó de 600 trabajadores a 25 en 1935. Hasta que llegada la posguerra fue adquirida por Altos Hornos de Vizcaya, recuperando su actividad constructora y racionalizando el tipo de actividades conocidas.

Los talles de Miravalles, Palencia e Ibaizábal, repararon para la red General, 65 vagones de  vía ancha en 1940 y otros 71 vagones en 1941 (Ferrocarriles y Tranvías, mayo de 1942, pág 133)